Debido al éxito generado por la presentación de mascarillas adecuadas para dar rienda suelta por San Valentín, nos hemos visto obligados a cumplir con los requisitos establecidos por la OMS, la UE, España, Villarrobledo y Villapene Parriba a verificar la calidad del producto, y/o, los efectos sobre las parejas que, de manera voluntaria, se han presentado para realizar el estudio de calidades y particularidades.
Estos datos que a continuación se describen, son los resultados aún sin firmar, por el gobierno de España, aunque a Simón no le hacen falta. Queda por saber, cómo se verán afectados los políticos, a excepción, de los ya acostumbrados al marisqueo y citas posteriores a los rincones de “igualdá”, tan comunes en las carreteras.
En total 3.433 individuos de diferentes ganaderías, entre parejas, tríos, cuartetos y sonetos. Mascarilla San Valentón modelo PicaPica FFPal 10 con dos depósitos cargados de anís seco Especial de Chichón 74º rellenables.
Un 56% de las parejas han dejado los depósitos vacíos tras el primer beso, por lo que se han visto obligados a recargarlos. Cuando los calores han apretado y la vista pedía labores orales, ambas partes se meneaban más de lo habitual con un ¡ay, ay, ay, insuperable!
Un 35% de los atrevidos, acudió de inmediato a colocar sus partes vitales en recipientes de agua fría, o en su defecto, si eran del tipo monedero, se echaban el líquido cual críos en la piscina.
Se han dado caso de pérdidas de la piel en algunas zonas sensibles, pero nada serio hasta el momento, unas vendas con crema a base de aceite de oliva para suavizar, guindilla para desinfectar, y después de los alaridos, todo ha vuelto a su cauce normal.
Del total expuesto, la mayoría ha sufrido irritación en sus genitales, en especial quienes se han mostrado dispuestos a recibir los calores por el orificio menos común, tras los brochazos a base del licor. Todos saltaban y saltaban aullando de placer, menos dos casos que han continuado con las labores típicas de los devaneos, eso sí, buscando entre quienes aún tenían el ciripolen sin inflamación visual, notable y palpable. Los pudientes han soltado importantes quejidos al introducir la varilla en las partes pertinentes.
Muertos no hubo ninguno, aterrorizados sí, que aquí de mentir nada, ya se lo digo yo, y con ganas de repetir, pocos, muy pocos.
En cuanto al “coronaasexual”, aún es pronto para saber si alguno ha sufrido contagio, pero en vista de la potencia del líquido, difícil lo veo. En definitiva, el 0,4% ha salido satisfecho y el 99,6% requetebién, muy requetebién escocido, tanto, que jamás olvidarán, este San Valentón de 2021.
Conclusiones: A la vista de los resultados preliminares, se ha propuesto una segunda prueba sin coste alguno para los posibles interesados. Ante los fuertes improperios, sapos, culebrillas, lagartos y demás bichos que nos han deseado, hemos decidido cerrar el invento y desearles que les con buenas morcillas, pues estamos seguros que las mascarillas San Valentón, son tan fiables, que a los portadores no se les acercan ni en broma.
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